La patronal del sector textil, Acotex, ha presentado los datos relativos a 2018 y ha confirmado los peores augurios. Se ha caído en facturación un 2,8%.
A pesar de que el año 2019 ha comenzado algo mejor de lo esperado, la situación requiere nuevas estrategias, con las que volver a buscar un crecimiento sostenido, que llevaba cuatro años consecutivos sin sufrir descensos.
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Por qué se vende menos en el textil
Acotex plantea dos principales problemas sufridos en 2018, para justificar la caída en ingresos. El primero de ellos la climatología, que podría haber lastrado la venta de colecciones por época del año. En segundo lugar, echa la culpa a la incertidumbre en la economía.
Este desequilibrio, no obstante, conduce a la verdadera situación crítica, que es la de un mercado en promoción continua, con ofertas todas las semanas y precios a la baja, que menoscaban la rentabilidad.
Efectos de 2018 en la industria textil
En 2018 las ventas cayeron un 2,8%, que en términos económicos esto representa en total unos ingresos por 17.686 millones de euros. Desde el año 2013 no se conseguía unos resultados tan bajos, pero en aquél momento se arrastraban los efectos de la crisis económica.
Esto ha tenido sus consecuencias en todas las marcas del sector. De forma global, se ha reducido el número de empleados un 0,86%, quedando ahora en 198.882 personas contratadas.
De igual forma, también se ha reducido el número de tiendas dedicadas a la venta de ropa y complementos. En la actualidad se fija en 61.313, un 1,39% menos que el año anterior y el segundo ciclo consecutivo en el que se reduce. No obstante, en este factor también influye la venta por comercio electrónico, que motiva el cierre de tiendas físicas.
Menor gasto de los hogares
¿Es posible que el sector se vea afectado por el gasto de los hogares que se dedica a la compra de ropa y otros complementos? Las cifras parecen confirmarlo, teniendo en cuenta que el descenso este año ha sido del 2,79%, hasta los 1.218 euros de media por hogar.